domingo, 28 de febrero de 2016

El arte de la valentía


El arte es algo que no todo el mundo entiende, pero tiene un significado para el que le presta atención. No todo el mundo  aprecia, pero tiene valor. No todo el mundo  reconoce, pero el que disfruta un encuentro con él… nunca vuelve a ser el mismo.

Admiro a aquellas personas que son capaces de crear para el mundo y en particular, para mí. Descubro en el arte, regalos que nunca se pierden (muchos nos encargamos de cederlos a los demás). Me imagino cómo esos regalos tan generosamente donados, van pasando de una mente a otra sembrando en cada uno de nosotros la curiosidad por la belleza.

Para ser un artista, siempre he pensado que hay que estar hecho de otra pasta, tener una sensibilidad exquisita, mirar la vida desde la observación consciente y ser capaz de asomarse a ella dando pasos que hagan poco ruido, al menos al principio. También pienso que los artistas, dan ejemplo a los que creemos en ellos y apostamos por una vida rodeada de belleza, de manera que la responsabilidad que recae en sus creaciones, no es pequeña. Y sobre todo, creo que aunque la mayoría de los artistas sienten en un momento de su vida que tienen una misión que va mucho más allá de lo terrenal… también hay otros tantos que no saben que lo son aun siéndolo desde que nacieron.

Ahora bien, dentro de todas las manifestaciones que podamos encontrar del arte, la que más me maravilla por el gran legado que supone su obra es, la de ser valientes. Es uno de los más difíciles de reconocer para el que nació con él o lo desarrolla a golpes de vida.


  • Cuando te miras al espejo y aunque no te gusta lo que ves, sigues sabiendo quién eres…
  • Cuando notas que alguien está rodeado de oscuridad y le ayudas a encontrar una vela…
  • Cuando sabes que tienes el control de tu vida pese a verla boca abajo…
  • Cuando piensas que a querer se aprende queriendo y das una segunda oportunidad…
  • Cuando dejas atrás el pasado y aprendes a vivir sin cargar la culpa de algo que hiciste mal…
  • Cuando la vida te lo está poniendo difícil pero tú estás por encima de las circunstancias…
  • Cuando alguien te rompió un trocito de ti y aún así, eres capaz de recordar sin rencor…
  • Cuando haces números para que cuadre el dinero de manera casi mágica para que tus hijos no lo noten…
  • Cuando dejamos la bola de cristal para los futurólogos y somos capaces de apostar por nuestro presente aunque tengamos miedo…
  • Cuando sentimos la ausencia de personas que nos dejaron antes de tiempo y no por eso amargamos la existencia a las que se quedan a nuestro alrededor…
  • Cuando queremos a personas que siguen a nuestro lado y sin embargo les invitamos a irse porque no es bueno que continúen su camino a nuestro lado…
  • Cuando tienes una mala racha y no dejas de investigar maneras para que termine lo antes posible…
  • Cuando te adaptas a los cambios por pésimos que estos sean y no dejas que sean ellos los que cambien tu perspectiva ante la vida…
  • Cuando estableces prioridades en tu vida y tu vista no se nubla cuando el viento no sopla a tu favor… 


Si te identificas con alguna de estas consideraciones, cuentas con toda mi admiración. No dudes en sentirse orgulloso porque en ti, hay belleza. A veces, no hace falta exponer una gran obra, ni tener rueda de prensa, ni que hablen de ti los telediarios para saber que eres un artista. Tu obra se basa en la valentía y tal y como comentaba al comenzar, tienes una responsabilidad muy grande para todos: tu ejemplo para los que te admiramos. Cuentas con algo que no todo el mundo tiene ni quiere desarrollar. Los valientes, son esos artistas que tienen el coraje que a otros les falta para descubrir la vida confiando en sus capacidades, reconociendo sus limitaciones y haciendo caso omiso al miedo porque aun teniéndolo, saben ignorarlo.

Atentamente, Alicia.



2 comentarios:

  1. Siempre he creído que todos tenemos aptitudes únicas desde que nacemos y pienso que son las circunstancias las que nos llevan a dejarlas aparcadas o crecer con ellas. Yo tuve la suerte de vivir el arte desde pequeño y eso me ayudó a hacerlo parte de mi. Aún así, al principio pensaba que no era una suerte contar con el arte, sino más bien una desventaja por la incomprensión y falta de reconocimiento....estaba equivocado. Con sólo una persona que lo aprecie de corazón y muestre su apoyo, merece la pena seguir. A estas personas todo premio y cualquier regalo es insuficiente para agradecérselo.
    Practican como explicas tan bien, el arte de la valentía. Son tal vez más difíciles de reconocer porque no crean belleza en algo palpable. No trabajan sobre un lienzo, un papel o una partitura...sino sobre si mismos. Sirven de ejemplo a los demás con su coraje, esfuerzo, modestia y enfrentándose a sus miedos.
    Afortunadamente siempre hay quien como tu Alicia, práctica el arte de la valentía y nos expone una realidad complicada de ver sino es con otros ojos.
    Gracias!!

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola Juande!

    Vivir rodeado de arte no te convierte en artista. Puedes vivir sin ser consciente el mismo, sin darle valor, sin esa curiosidad por él... en tu caso por suerte no fue así. Aprovechaste la oportunidad de tenerlo a mano y desarrollaste tu capacidad: dos factores necesarios para crear.

    Enhorabuena, Juande.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar